3.2.07

Momentos cinematográficos

Leyendo a Nacho Vigalondo decidí robarle una idea y desarrollarla aqui.

La lista de los 10 momentos que mas me han marcado en mi historia de cinéfilo, cabe aclarar que no están en orden, simplemente son 10 momentos que están ahi a perpetuidad:

1) Tenía yo unos 8 años cuando mis amigos, todos ellos mayores en aquellas épocas, decidieron rentar Halloween II y hacer una doble función junto con Furia de Titanes. La función se dió en casa de uno de ellos, sin ningún adulto en los alrededores. Tardé casi 10 años en librarme del shock y poder ver cualquier peli de terror, y todavía un poco mas para volver a ver Halloween II. De hecho la vez que asistí a ver Halloween I en el cineclub de ciencias, conforme abria la peli con la musiquita que tiene, temblé.

2) La primera vez que vi El cocinero, el ladrón, su esposa y su amante. Fue algo verdaderamente revolucionario, los colores, la estructura, lo barroco de la cinta, en verdad cambió para mi lo que se podía hacer con el cine.

3)Perros de Reserva. Ya estaba yo entrado un poco mas en el cine y había leido al respecto de la cinta, tenía muchas ganas de verla y la iban a pasar en la cineteca en una unica función, no recuerdo a que hora de la tarde. Fui a verla con mi madre.

4)Las abuelitas satánicas. Mau y yo habíamos decididó ir a rentar al blockbuster la película mas guajolotera que pudieramos encontrar, y la ganadora absoluta fue las abuelitas satánicas. La terminamos viendo junto con mi hermana, mi hermano y el vecino. El resultado fue horas de risa loca con Mauricio y yo imitando a la perfección a los muchachos del Mistery Science 3000

5)Eraserhead, Bitter Moon y El topo. Las perseguí hasta que conseguí verlas, cada una creo haberla perseguido consientemente mas de 3 años, esto claro en una epoca donde el torrent existía solo en la mente de los cyberpunks mas clavados. Fueron un logro.

6)El maratón de cine de ciencias: 24 horas de cine en el auditorio mas incómodo de la UNAM, una cobija, el Mau y la banda de ciencias. Lo hice en dos ocasiones. En alguna de ellas Mauricio llevó una bolsa de palomitas tamaño industrial, después de 3 peliculas seguidas comiendo palomitas y la boca hecha in orejon deshidratado unos desconocidos nos pidieron la bolsa (la que entregamos sin problemas), solo para que nos fuera regresada un par de peliculas después acompañadas de francas miradas de odio.

7)El cineclub de ciencias: Merece una mención extra, el 80% de mi educación cinematográfica se lo debo a las funciones de los jueves a las 11:00 am

8)Bud Spencer y Terence Hill: El encanto del cine de entretenimiento puro. Ver películas de ambos en La linterna mágica. Intermedios y palomitas rancias. Ese sería el cine nostálgico de mi "Cimena Paradiso" personal.

9)El jingle del Estacionamiento del cine Perisur: Antes de las grandes cadenas de cine en México, los asientos estaban todos al mismo nivel, el piso estaba pegajoso de meses y meses de capas de refrescos y vendían sandwiches con un jamón de dudoso orígen y fecha de caducidad. Entonces vino el cine Perisur. Butacas escalonadas, luces en el piso para indicar los pasillos, el comienzo de la revolución que finalmente lo llevaría a la guillotina. Pero el jingle del estacionamiento no tenía madre. Reimos por horas con el dichosos jingle. Quien lo vió y comparte el chiste felicidades, para todos los demás, lástima es de las tonterías que me han transformado en lo que soy.

10)Delicatessen: La pelí nuevamente la exhibían solo un día. El mismo día me enteré y convencí a la mujer que en aquel entonces me gustaba de ir conmigo al cine. Gocé enormemente la pelí. Mas tarde en la camioneta de mi madre (misma que me había prestado para mi date) (y que tardó unos 10 años mas en morir) nos besamos. Ella tenía novio. Los vidrios se empañaron. Muchas veces he vuelto a ver delicatessen y en ocasiones me pregunto que habrá sido de la película en la memoria de esa chava.

Hay mil momentos mas, conforme me sentaba a pensar en que mas puntos el cine había jugado un papel importante en mi vida o en que momento me clavé mas en saber que hacía el grip, o el foley, o el inferno artist, y quien dirigía que películas, aprender a buscar el microfono que se mete en la escena y los errores de continuidad, ir al cine a ver explotar autos solo porque estan cerca de una paloma y ver como todos los romances franceses terminan con alguna persona perdiendo la razón, se que la lista es inumerable, cada encuentro con una historia, con un plano o con un dialogo inteligente, ya sea solo o acompañado, es pretexto para algo nuevo.

Lo bueno es que también me pasa con los libros y con otras cosas. Quizá ese sea una buena continuación, los momentos literarios de mi vida...

2 comentarios:

Mau dijo...

Las abuelitas Satánicas serán siempre un clásico.

Sigue Gozando!

Anónimo dijo...

Curiosamente Las abuelitas satánicas la vi cuando tenía 8 años y causó un enorme trauma en mí, pero años después ya ninguna película de terror me daba miedo y andaba buscándola de nuevo para superar mis traumas de la infancia XDXD, pero ahora que la recuerdo me da risa que algo así me diera tanto miedo.